Volver a

¡Lo sé! Me dirás que no sabes lo que ocurre contigo en esos días, pero tranquila, hoy en día hay mucha información en la red e incluso especialistas que se han vuelto más minuciosos en este aspecto, así que si de pronto a veces te pasan esos antojos, es completamente normal. 

A unas de Nosotras les da por comer dulce y a otras alimentos salados o simplemente cosas extrañas, siendo sincera y en mi calidad de nutricionista, puedo ayudar mucho ante estos deseos por querer tener en tres chasquidos todo lo que nos apetece.

Pero, ¿qué te parece si mejor nos relajamos?, podemos tomamos una taza de té y probamos las opciones que tenemos:

  • Antes de preferir calorías vacías como productos de panadería, mejor escoger frutos secos, garantizando saciedad, de esta manera aportas con pocos carbohidratos pero más grasas buenas, puedes escoger los que más te gusten. Por ejemplo, las semillas de zapallo son muy buenas, solo tienes que tostarlas y -¡voila! ¡boom!- un mix de sabores intensos y hasta adictivos, pasará de sólo ser semillas a tener la mejor experiencia en sabores ¿Vale?

  • Lleva siempre contigo una fundita de frutos deshidratados, así por cada antojo habrá una opción saludable al alcance de tu bolsillo, ya sean, manzanas, bananas, piñas, entre otras, todas ellas deshidratadas. Aparte que no ocupan mucho espacio, son prácticas y si tu objetivo es bajar de peso ¡mucho mejor!

De esta forma, no le aportas alimentos innecesarios al cuerpo sino lo contrario, hacen que tu metabolismo sea más eficiente con tus comidas. Y por último.

  • Duerme bien. Así evitarás estar al siguiente día con horarios descuadrados en tus comidas, causando una cadena de círculos viciosos que a larga sólo te llevan a sentirte peor.

Por eso, duerme bien, vive bien, amarte bien y por supuesto hagamos las cosas bien.

Las quiere Erika Crespin, tu nutri.

Déjanos tus comentarios