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Día a día las mujeres vivimos en constante presión, nos invaden pensamientos, ¿si encajo con mi cuerpo?¿Si estoy bonita? ¿Estoy muy arrugada? y en fin… Numerosos pensamientos de inseguridad y todo ¿por qué?

Esto es porque comercialmente se venden cuerpos perfectos y mujeres hermosas siempre, pero hoy, me atrevo a decir que todas somos hermosas, ya sea haciendo el aseo de la casa, ya sea marcando con los niños, trabajando o simplemente siendo mujeres, hay veces esa presión nos impide tanto ser felices que vivimos opacas y escondiéndonos, pero hoy te digo que eres mujer y solo por ese hecho, ya es para que disfrutes de la vida y de tu feminidad.

Si quieres usar los tacones del color que quieras, usa los vestidos y faldas más locos que existan, usa diferentes peinados, no te limites y no te preocupes que las mujeres tenemos variedad de cuerpos, rostros, porque es necesario que cada una resalte la belleza sin medida.

Todas somos hermosas, solo sonríe, disfruta y verás cómo tu vida cambiará. Hay veces que creemos que el mundo no está hecho para nosotras, pero solo es una idea, estás hecha a la medida para ser tú, una mujer, decidida, guerrera, que se come el mundo porque sabe que tiene el poder.

Solo avanza pero por ti, no mires a otras y no te compares, empieza a tener tu propio valor, piensa en ti, concéntrate en ti, en tu valor, en reconocer cada detalle que te hace única en el mundo, que te hace diferente y con capacidades extraordinarias. Sube tu mirada, abre tus ojos, mira más allá de la montaña y decide ir más allá.

Con tu cabello, con tus ojos, con tu forma de ser, con lo que eres, porque la mujer es luminosa, es una creación con capacidades incalculables. Así que no te rindas, ríe de lo que viene y vive tu feminidad a tu manera.

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